IT'S EASY TO FIND A JUDD'S BED

(ES FACIL ENCONTRAR UNA CAMA DE JUDD)

PROYECTO INDIVIDUAL EXPUESTO POR LA GALERÍA SIBONEY EN ARTE SANTANDER 2021- JULIO 2021

Vista del proyecto instalado en Arte Santander 2021

El título hacía un guiño a “It’s hard to find a good lamp”. Texto escrito en 1993 por Donald Judd. En el que explicaba su relación con los muebles, las razones que le habían empujado a diseñarse los suyos, y porque mantenía una clara separación entre su obra escultórica y la oficina de proyectos arquitectónicos y de producción de mobiliario. 

 

D. Judd, cama estudio La Mansana, Chinati, Marfa. 20219. Acrílico/tela. 35 x 35 cm.

 

D. Judd, prototipo de taburete. 2017. Gouache/papel. 13x 21 cm.

D. Judd, daybed y coffe table. 2021. Gouache/papel. 38 x 57 cm

 

Teresa Moro llegó a Donald Judd y a sus muebles de manera azarosa cuando prospectaba para su serie sobre dormitorios de artistas y un amigo le habló de la cama que se podía ver en la sede neoyorkina de su fundación. A ese primer descubrimiento se unió el que una revitalizada atención hacia la obra del americano ha provocado el afloramiento en Internet de abundante documentación hasta ahora menos accesible. El interés de la artista se acabó de despertar al conocer la maravillosa colección de muebles que Judd atesoraba, y que ha sido objeto de retrospectivas recientemente. 

 

 

D. Judd, cama 5ª planta con muebles colección (Rietveld y Alvar Aalto). 2019. Acrílico/tela. 114 x 146 cm.

Algunos muebles de la coleccion de D. Judd. 2021. Gouache/papel. 18 cm de diametro.

D. Judd, mesa con silla Mies Van der Rohe. 2020. Gouache/papel. 38 x 57 cm.

 

Algunos muebles de la coleccion de D. Judd. 2021. Gouache/papel. 18 cm de diametro.

 

 

Al minimalista le gustaba mezclar mobiliario con sus piezas artísticas. Y como cosa curiosa, parece que solía colocar camas en todos los espacios donde trabajaba. Para él concentrarse en los proyectos incluía la posibilidad de echarse una siesta mientras estaba allí pensando. No es de extrañar que Moro haya pintado hasta 5 camas diferentes del artista.  

 

D. Judd, cama 5º planta NY. 2021. Gouache/papel. 38x 57 cm.

 

D. Judd, "Library bed", NY. 2019. Gouache/papel. 28 X 38 cm.

D. Judd, cama estudio La Mansana, Chinati, Marfa. 2018. Gouache/papel. 28 x 38 cm.

D. Judd, cama estudio de arquitectura, Marfa. 2021. Acrílico/tela. 35 x 35 cm.

El inventario también incluye mesas de trabajo y parte de su colección con nombres como Gerrit Rietveld, Mies Van Der Rohe o Alvar Aalto entre otros. 

 

D. Judd, mesa trabajo estudio proyectos. Marfa. 2020. Gouache/papel. 28 x 38 cm.

D. Judd, mesa trabajo, NY. 2020. Gouache/papel. 28 x 38 cm.

Otra singularidad destilada de la investigación y que Moro ha querido apuntar, es la pasión que Judd tenía por la artesanía textil, evidenciada por una sorprendente acumulación en sus casas de toda clase de alfombras, mantas y tapices. Telas siempre con motivos de campos de colores y patrones geométricos, desde tartán escocés hasta tejidos de los pueblos indígenas americanos, en los cuales se detecta fácilmente el paralelismo con la obra de su dueño. 

 

D. Judd, manta roja y negra. 2021. Acrílico/tela. 35 x 35 cm.

D. Judd, textiles navajos. 2021. Gouache/papel. 28 x 57 cm.

D. Judd, dormitorio navajo, 2021. Acrílico/tela. 35 x 35 cm.

De nuevo un archivo de reliquias de artista ordenado de forma muy particular que pretende rendir un personal homenaje a un nombre imprescindible del siglo XX y sobretodo al acto extraordinario de crear. 

 

D. Judd, gafas. 2021. Gouache/papel. 13 x 21 cm.

 

D. Judd, metro de carpintero. 2021. Gouache/papel. 38 x 57 cm.

D. Judd, camisa tejana. 2021. Gouache/papel. 76 x 57 cm.

Agradecimiento a la Galería Siboney de Santander.

Parte de estas obras se produjeron gracias a una ayuda del Fondo Asistencial y Cultural de VEGAP concedida en 2020.